CIS
COMUNICA.- 30/03/2018.- Los trabajadores de la curtiembre vienen
llevando adelante asambleas con manifestaciones en la puerta de la
curtiembre Sadesa ubicada en la ciudad de Esperanza, unos 50 Km al
norte de la capital santafesina.
Reclaman una recomposición salarial que ayude a mitigar el efecto pulverizador de sus salarios a manos de la devaluación acompañada de la suba de los precios de los servicios y los productos de primera necesidad.
Sadesa se resiste a otorgar alguna mejora que no implique mayores niveles de producción por lo que las negociaciones se encuentran estancadas en ese punto. La asamblea resolvió no realizar horas extras durante el fin de semana hasta tanto la empresa ofrezca una recomposición salarial acorde a la inflación que afectó seriamente el poder adquisitivo de los curtidores esperancinos.
Por su parte, la empresa propone adelantar una actualización de los items “No convencionales” que históricamente se negocian post-paritarias. La futura negociación de los “Items No Convencionales” establecerán el piso en la futura negociación en el transcurso del año tomando como referencia el porcentaje de la futura paritaria.
Contrario a las argumentaciones en la mesa de negociación con el Sindicato de Obreros de la Industria del Cuero de Esperanza, Sadesa cerró un año ganancias siderales los últimos dos años según sus ejercicios contables presentados a Comisión Nacional de Valores.
En 2017, los obreros de Sadesa curtieron unos 3 millones de cueros, sus exportaciones superaron los 185 millones de dólares, arrojando una ganancia neta de 5.823.263. Las inversiones en maquinarias e instalaciones, ascendió a la suma $ 154.514.000, tanto en las plantas de Esperanza y Lomas de Zamora. En ningún parrafo del documento se hace referencia a la mejora en las condiciones salariales de su “CAPITAL HUMANO” como se denomina a los obreros que se resisten a realizar horas extras para exigir aumento salarial en una empresa de un país en crisis.
“En su compromiso con el cuidado del medio ambiente, instaló una planta con tecnología de punta para su instalación industrial, ubicada en Esperanza, a un costo original de 9,3 millones de dólares. Esta planta fue construida en asociación con la Municipalidad de la ciudad de Esperanza”.
También, la planta de Lomas de Zamora, provincia de Buenos Aires, cuenta con una planta de tratamiento de efluentes con moderna tecnología a un costo original de 7,5 millones de dólares.
Las inversiones relacionadas con las plantas de tratamiento de efluentes en el año 2017 alcanzaron la suma de U$D 2.843.000 lo que revela la existencia de una preocupación constante en el mejoramiento de estos procesos.
Los trabajadores según Sadesa “conforman el capital humano imprescindible para el funcionamiento en todos los órdenes de la organización. La implementación de buenas prácticas tiende a asegurar a largo plazo, la continuidad del personal capacitado de cualquier nivel... así como el establecimiento de una comunicación fluida contribuye a reducir los conflictos laborales y lograr un mejor ámbito de trabajo”.
Y cierra el acta 1109: “El Directorio considera que Sadesa S.A. se encuentra suficientemente capitalizada y el Capital Social guarda una razonable proporción con el Patrimonio Neto, por lo que propondrá a los accionistas el pago de dividendos en efectivo por la suma de $ 214.467.901”. Y “Se aclara que en la composición de los resultados del ejercicio se incluyen un Bono de 1 millón doscientos cincuenta mil pesos para el Directorio, adicional al sueldo básico de 23 millones de pesos por el año 2017, a repartir entre los señores Miguel Alejandro Galperin y Tomas Martin Galperin, Ronaldo Eduardo Hawes, Edgardo Horacio Perren y Daniel Pablo Gordon.
Las negociaciones deberían retomarse en los próximos días.
Reclaman una recomposición salarial que ayude a mitigar el efecto pulverizador de sus salarios a manos de la devaluación acompañada de la suba de los precios de los servicios y los productos de primera necesidad.
Sadesa se resiste a otorgar alguna mejora que no implique mayores niveles de producción por lo que las negociaciones se encuentran estancadas en ese punto. La asamblea resolvió no realizar horas extras durante el fin de semana hasta tanto la empresa ofrezca una recomposición salarial acorde a la inflación que afectó seriamente el poder adquisitivo de los curtidores esperancinos.
Por su parte, la empresa propone adelantar una actualización de los items “No convencionales” que históricamente se negocian post-paritarias. La futura negociación de los “Items No Convencionales” establecerán el piso en la futura negociación en el transcurso del año tomando como referencia el porcentaje de la futura paritaria.
Contrario a las argumentaciones en la mesa de negociación con el Sindicato de Obreros de la Industria del Cuero de Esperanza, Sadesa cerró un año ganancias siderales los últimos dos años según sus ejercicios contables presentados a Comisión Nacional de Valores.
En 2017, los obreros de Sadesa curtieron unos 3 millones de cueros, sus exportaciones superaron los 185 millones de dólares, arrojando una ganancia neta de 5.823.263. Las inversiones en maquinarias e instalaciones, ascendió a la suma $ 154.514.000, tanto en las plantas de Esperanza y Lomas de Zamora. En ningún parrafo del documento se hace referencia a la mejora en las condiciones salariales de su “CAPITAL HUMANO” como se denomina a los obreros que se resisten a realizar horas extras para exigir aumento salarial en una empresa de un país en crisis.
“En su compromiso con el cuidado del medio ambiente, instaló una planta con tecnología de punta para su instalación industrial, ubicada en Esperanza, a un costo original de 9,3 millones de dólares. Esta planta fue construida en asociación con la Municipalidad de la ciudad de Esperanza”.
También, la planta de Lomas de Zamora, provincia de Buenos Aires, cuenta con una planta de tratamiento de efluentes con moderna tecnología a un costo original de 7,5 millones de dólares.
Las inversiones relacionadas con las plantas de tratamiento de efluentes en el año 2017 alcanzaron la suma de U$D 2.843.000 lo que revela la existencia de una preocupación constante en el mejoramiento de estos procesos.
Los trabajadores según Sadesa “conforman el capital humano imprescindible para el funcionamiento en todos los órdenes de la organización. La implementación de buenas prácticas tiende a asegurar a largo plazo, la continuidad del personal capacitado de cualquier nivel... así como el establecimiento de una comunicación fluida contribuye a reducir los conflictos laborales y lograr un mejor ámbito de trabajo”.
Y cierra el acta 1109: “El Directorio considera que Sadesa S.A. se encuentra suficientemente capitalizada y el Capital Social guarda una razonable proporción con el Patrimonio Neto, por lo que propondrá a los accionistas el pago de dividendos en efectivo por la suma de $ 214.467.901”. Y “Se aclara que en la composición de los resultados del ejercicio se incluyen un Bono de 1 millón doscientos cincuenta mil pesos para el Directorio, adicional al sueldo básico de 23 millones de pesos por el año 2017, a repartir entre los señores Miguel Alejandro Galperin y Tomas Martin Galperin, Ronaldo Eduardo Hawes, Edgardo Horacio Perren y Daniel Pablo Gordon.
Las negociaciones deberían retomarse en los próximos días.