CIS COMUNICA.- 06/12/2020.- 7 días le lleva al hipódromo recaudar todo lo que les descontó a su personal durante los meses que van de cuarentena, todo nombre de un anticipo de sueldo que tampoco explica porque en realidad fueron fondos ATP, girados por el estado a través de ANSES a la cuenta sueldo de los trabajadores cuyo excedente la empresa toma como parte del salario a abonar sobre el básico en ingresos cuyos montos marginales del recibo de sueldo ascienden al 55%. Toda una ingeniería contable aplicada con el fin de estafarlos.
En 8 días los trabajadores del Hipódromo de Palermo deberán cobrar el aguinaldo completo, sin ninguna certeza a la vista. ‘Era esto o la calle’. El slogans para inmovilizar. Golpizas para disciplinar.
Los trabajadores del hipódromo no dejaron de perder derechos y beneficios durante la gestión del empresario Diego Quiroga, por sus métodos idénticos, es un gerente del hipódromo a cargo del sindicato. Han perdido la prepaga Swiss Medical que en concepto de salario en especie les otorgaban, el doble aguinaldo, que se abonaba en el segundo semestre del año. Trabajan 3 horas extras semanales impagas porque tienen una jornada de 8 horas y media diarias, percibiendo solo 8 horas, para lo cual todos deben fichar media hora antes del egreso. El “fallo de caja” es desproporcionado de acuerdo a las sumas manejadas por los cajeros, cuando son apercibidos los obligan a firmar sin que les den copia de la notificación.
El CIS junto a sus afiliados en el hipódromo rechazó, impugnó formalmente -por ser contrario al principio de irrenunciabilidad (Art. 12 LCT)- la reducción salarial consecuencia del acuerdo entre la CGT – UIA, y ratificado por el hipódromo y APHARA, este acuerdo legalizó todo tipo de abusos y afectó el cobro integro del 100% de los salarios sin que ningún trabajador afectado haya prestado conformidad, desconociendo derechos individuales por lo cual los acuerdos citados son nulos e ineficaces, atento la falta de consentimiento de los trabajadores del Hipódromo, por lo cual los descuentos en cuarentena son nulos.
También se intimó al hipódromo a cesar en los hechos de violencia física y verbal, amenazas, y persecución manifestada por la gerencia del hipódromo, así como integrantes del Sindicato APHARA, todas denunciadas penalmente. Respecto a esto, la comisión directiva del gremio APHARA, -integrada mayoritariamente por miembros de la familia Quiroga- desmintió tener algo que ver con la patota que apareció a golpear y robar a los trabajadores en medio de una asamblea, que nuestras denuncias en sede judicial solo son intentos de ‘desprestigiar la institución’. Lo cierto es que en febrero de este año cuando el CIS realizó las elecciones de delegados frente al hipódromo, fue el propio Diego Quiroga y sus laderos quienes convocaron a los delegados para ‘persuadir’ a los trabajadores que quisieran acercarse a votar.
Por el madrugón el hipódromo los compensó con 2 mil pesos. ‘Vengan armados’ les dijeron, pero los delegados, más allá de su omisiones frente a tantas injusticias que presencian a diario, son o fueron trabajadores, no pertenecen a ese submundo al que los quieren sumergir. Algunos son tan víctimas como el resto de sus representados a los que nunca les permiten defender.
Viven amenazados, que les sacan esto, lo otro, la prepaga Sancor Sauld, el cargo, etc.
Es que Diego Quiroga tiene claro que si el cuerpo de delegados le suelta la mano, se termina su reinado familiar en el sindicato, por eso los somete y los mantiene en un analfabetismo respecto a la gestión. Algo está llegando a su fin en el hipódromo, la paciencia de los trabajadores y la impunidad de los Achaval-Quiroga.
En el caso que Sancor Salud le retire o niegue prestaciones por el hecho de afiliarse a CIS o desafiliarse del gremio patronal, estaríamos frente a un incumplimiento de contrato motivada por la discriminación que implicarían daños morales y perjuicios económicos por la que sus responsables deberán responder ante la justicia, como ya lo están haciendo en el caso de los despidos con causas inventadas.
Por eso, todo lo que le queda repetir es que CIS-CTA ‘no tiene personería’ que ‘no es legal’ aunque 15 jueces en el caso del hipódromo le han dicho lo contrario y los han obligado a respetar a los representantes sindicales del CIS-CTA. Ni Federico de Achaval cuando estuvo frente a los jueces supo explicar esta supuesta ilegalidad con la que niegan derechos y abusan de sus trabajadores para proteger la complicidad sindical que ya no es tan impune.
No hay comentarios:
Publicar un comentario